Cónclave 2025: más cardenales, más diversidad
El cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco será el más numeroso e internacional en la historia de la Iglesia católica, debido a que participarán 133 cardenales electores, con lo que se supera el límite de 120 que fijó Pablo VI, señaló Andrés Beltramo Álvarez, especialista en temas vaticanos y directivo de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep).
Esta ampliación fue promovida por el papa Francisco como parte de una visión más inclusiva.
El cónclave iniciará formalmente el próximo 7 de mayo en el Vaticano.
Andrés Beltramo, director general de Promoción y Comunicación Estratégica de la Upaep, explicó que 108 de los electores fueron nombrados por el pontífice Francisco, lo que otorga una enorme influencia sobre el perfil del futuro papa, si bien eso no garantiza continuidad doctrinal, sí implica una apertura geográfica; además, la edad promedio del electorado es de 70 años.
El especialista señaló que el papa Francisco transformó el equilibrio del colegio cardenalicio favoreciendo a regiones emergentes, muestra de lo anterior es que Europa ya no es mayoría al tener solo 52 cardenales frente a 82 del resto del mundo.
Beltramo Álvarez resaltó que América, África y Asia han ganado representación, destacando países sin tradición cardenalicia, como Mongolia, Sudán del Sur y Haití, que son ejemplos claros de esta renovación eclesial.
El especialista de Upaep indicó que el proceso será complejo y marcado por la diversidad cultural entre los cardenales, aunado a que muchos de ellos apenas se conocen entre sí, lo que podría dificultar los consensos rápidos.
Pese a esto, ya circulan nombres relevantes dentro de las conversaciones preliminares al cónclave, en donde entre los posibles sucesores destacan Pietro Parolin, actual secretario de Estado vaticano, y Matteo Zuppi, de perfil más pastoral. También figura el estadounidense Timothy Dolan, representante del ala conservadora del colegio cardenalicio.
Como opción de consenso surge el cardenal Pierbattista Pizzaballa, patriarca latino de Jerusalén, por su carisma y sensibilidad.
El especialista explicó que el cónclave seguirá la tradición con una misa de apertura, procesión a la Capilla Sixtina y se prevé que el proceso se lleve varios días. Una vez elegido el nuevo papa, se retirará a la sala de las lágrimas antes de salir al balcón de San Pedro, para ser anunciado mediante la fórmula del habemus papam. El pontificado iniciará formalmente con una misa días después.